>En el IPC y en Fundapatrimonio aseguran desconocer remodelaciones
Son casi 700 los faros que, hace unos meses, fueron sustituidos en los diversos corredores del llamado Sistema de la Nacionalidad, conformado por la avenida Los Próceres conjuntamente con los paseos Los Precursores, Los Símbolos y Los Ilustres. Ante la mirada incauta de los caminantes habituales de la zona obreros cortaron las antiguas luminarias de hierro fundido y soldaron 690 nuevas piezas de aluminio.
Desafortunadamente, según explica Hannia Gómez, presidente de Fundamemoria, no es la primera vez que ocurre una sustitución «arbitraria» del sistema de iluminación. Hace unos años protestaron, sin resultado, por el cambio de varias de las luminarias originales de 1957 creadas en hierro fundido y esferas de vidrio translúcido.
Adicionalmente hace una semana inició la demolición de las tribunas de concreto que se distribuyen a lo largo de los 1,2 kilómetros del Paseo Los Próceres. «Esto es una desfiguración de este bien urbano», considera Gómez sobre piezas que, en caso de encontrarse en pésimas condiciones, deben someterse a un proceso de restauración para conservarlos en su lugar de origen.
Sobre el cambio de los faroles se pudo conocer que en la Dirección de Protección Integral del Instituto del Patrimonio Cultural no reposa ningún permiso para sustitución de mobiliario. Sin embargo, desde la institución aseguran que todos los trabajos que se realizan en el Sistema de la Nacionalidad han corrido por cuenta de la Fundación para la Protección del Patrimonio Cultural (Fundapatrimonio) y que ellos son los encargados de responder por las obras.
Pasa inadvertido que el artículo 24 de la Ley de Protección y Defensa del Patrimonio Cultural dice que «quedan sometidos a la inspección y vigilancia del Instituto del Patrimonio Cultural, a los fines de su protección y conservación, las edificaciones de cualquier época perteneciente a nuestra arquitectura civil, militar o religiosa, con todo lo que contengan».
Gómez aclara que, sin ánimos de justificar al IPC, uno de los problemas que presenta el organismo es que debe supervisar a todo el país con un equipo de trabajo muy pequeño. No obstante es enfática: «Exhortamos al arquitecto Héctor Torres (presidente del IPC) a que persiga a los criminales que están deformando este patrimonio, que los denuncie y que los obligue a restituir lo que han quitado porque estamos seguros de que él no está de acuerdo con esto».
A Torres lo faculta la Ley rectora de la materia en su artículo 28 que contempla que el IPC puede «impedir o paralizar cualquier trabajo que se realice sin su aprobación (…) y en caso que se haya comenzado o concluido, podrá ordenar que se proceda a reponer el bien».
Tras varias llamadas hechas por El Universal a Fundapatrimonio, resultó imposible recibir información directa de su presidente Wilfredo Boada, así como de la gerente de Parques y Plazas, Yenilce Requena. No obstante, a través de la Alcaldía de Libertador se pudo conocer que las labores que el organismo realiza en el Sistema de la Nacionalidad corresponden a trabajos de «mantenimiento común de las instalaciones» y nada tienen que ver con la remoción de mobiliario.
Fuentes ligadas a Fundapatrimonio afirmaron que el resto de los trabajos que se realizan en el lugar corren por cuenta de la Vicepresidencia de la República y del Ministerio de Defensa.
En 2007, Fundapatrimonio ejecutó 72 obras para la rehabilitación del paseo. Desde ese entonces ningún otro trabajo de gran envergadura ha sido oficialmente anunciado ni a la ciudadanía ni a las instituciones que, según la legislación vigente, deben encargarse de la supervisión de estas obras. >Ω