Por: Eduardo Guzmán

Se llama ‘Dinero Sionista’ al último avatar del Dinero, conocido también como ‘Dinero Absurdo’. ¹

Y hay que llamarlo también así, Dinero Sionista, porque los sionistas, después de alcanzada su Sión con la creación del Estado de Israel, como no podían siquiera imaginar lo único sensato que debían hacer con el privilegio que les había proporcionado la capacidad económica y política para hacer aquella operación –a saber: acabar con ese privilegio del Dinero Absurdo, consistente en endeudar a todos los demás sin poner nada suyo en la operación de crédito o endeudamiento, que atrasa material y económicamente a todas las sociedades que lo padecen– siguieron adelante poniendo en marcha poco después esto que ahora llamamos y muchos reconocen como ‘globalismo’, confundido con el ‘imperialismo’ que, en esta etapa de la historia, suele atribuirse a Estados Unidos.²

En realidad, lo que está en el centro del globalismo o imperialismo estadounidense, que muchos reconocen como anglosajón, es el sionismo que domina en la política británica al menos desde la segunda mitad del siglo XIX, y la fuente de alimentación principal del sionismo es el crédito privado interesado, tras haber logrado convertirlo en método de creación del dinero en Occidente y gran parte del mundo.

Ése es el dinero que organiza y financia la guerra de Ucrania, la Operación Covid, ³ la agenda climática y energética, los apagones por medio mundo, las migraciones recientes (algunas de ellas con zapatillas de marca y teléfono móvil), el resurgimiento del racismo, la multiplicación de las identidades y fluidez de los géneros, la fragmentación de las naciones, el debilitamiento de sus fronteras, las amenazas por medio mundo procedentes del centro de poder de Occidente, con su brazo armado la OTAN en espansión, etc., etc.: toda la sarta de operaciones de reactivación de la rapiña secular y manipulación de masas que parten de la Agenda 2030 y olvidan fijarse en el dinero que está detrás esa agenda y de cada una de las sucesivas crisis: todo eso se hace invirtiendo grandes cantidades de dinero, lo primero, en control de la política y la información, ⁴ y ésas se invierten para conseguir aún aún más poder y control. ⁵

Entre octubre de 2023 y este mes de junio de 2024, el sionismo ha seguido utilizando a judíos, moros y cristianos, en un intento de aprovechar el caos internacional previamente sembrado por ellos mismos para iniciar otra etapa de limpieza étnica en Palestina y llevar adelante sus aspiraciones a tener a su servicio un Estado como Dios manda, una superpotencia, como corresponde a los Cuarenta Ladrones. ⁶

Sería o quiere ser ya, ésa de Israel, la Superpotencia entre las superpotencias, pues ya ha demostrado su capacidad para imponer sus intereses en la que hasta hace bien poco se consideraba la primera potencia mundial, Estados Unidos.

Hablamos del dinero que ha organizado, además de las grandes operaciones mediáticas de desprestigio de las iglesias cristianas en general, ⁷ la colaboración del Papa jesuita con el proyecto globalista, ⁸ quien tiene encomendado “liquidar la Iglesia Católica”, ⁹ como se manifiesta en su encíclica Fratelli Tutti, torpe intento de hacer un engendro de nueva religión mundial para el Nuevo Orden Mundial sionista u occidental, es decir, el nuevo orden Mundial que el Dinero Sionista quiere para el mundo entero.

Criticar el imperialismo o el globalismo sin hablar del sionismo, o criticar el sionismo sin ver esa fuente de alimentación que le regalamos casi todos los occidentales con este método de creación del dinero, es como tratar de esplicar el motor de esplosión sin mencionar la gasolina, o la bicicleta sin hablar de la rueda.

Entiéndase de qué manera cualquier nación del patio, trasero o –como las de la Unión Europea– delantero, del Imperio está financiando los ejércitos imperiales por el mero hecho de mantener vigente esta estafa del Dinero Sionista en el centro del Sistema: ¹⁰

Como la banca internacional controla las bancas nacionales, y como ellos tienen establecido ¹¹ que lo que limita la capacidad de creación de dinero (crédito) es la cuantía de los fondos propios, ¹² eso quiere decir que con sólo aumentar a su antojo el capital de un banco controlado, ¹³ la banca internacional puede crear cuanto dinero quiera en la moneda de ese banco para comprar, con ese dinero que nada le ha costado, cuantos dólares sean precisos para arruinar a discreción su valor en el mercado de divisas, crear la consiguiente inflación nacional y dolarizar la economía de que se trate.

Las redes de tráfico de influencias, que constituyen la norma en las relaciones entre las administraciones públicas y el sector privado en Estados Unidos, son alimentadas sin cesar por este Dinero Sionista que tiene su imagen fiel en la elegida nación de muchos de los principales altos cargos de esa Administración.

La prensa o los medios de masas de todo Occidente son sionistas, y cando no lo son, casi no se leen o escuchan.

Esas biblias proliferantes que no distinguen las dos versiones tradicionales del padrenuestro ¹⁴ han sido financiadas y son reimpresas una y otra vez por el Dinero Sionista. Esto que parecerá sin importancia a quienes crean que los problemas testuales de la tradición cristiana ya pasaron a la historia reviste, sin embargo, la máxima importancia, como bien saben los asesores o tanques pensantes de los Cuarenta Ladrones, puesto que la modernidad occidental, dominada por ese falso dios Dinero, no ha sabido desarrollar una manera de pensar y vivir que supere a aquélla que floreció en la Galilea antigua en cuanto a su capacidad para dar libertad a los integrantes de la comunidad fortaleciendo a la vez ésta. ¹⁵

De ahí la eterna hostilidad de los mercaderes, cuyos mejores herederos y cesionarios son estos Cuarenta Ladrones del dinero moderno, sionista o absurdo, contra esa religión de los pobres ¹⁶ y, más en general, de cualquiera que, a despecho de las eruditas y mendaces enseñanzas de la filosofía moderna, pretenda seguir tomándose en serio el centro inspirador de cualquier religión que merezca ese nombre. ¹⁷

Y en el siglo XXI, por esa estraña supervivencia de las ubicuas asambleas cristianas, una comunidad de cristianos libres sigue siendo, a pesar de los conocidos abusos de las iglesias y sus pastores, sacerdotes o jefes, la mayor amenaza que pesa sobre cualquier poder terrenal, y en especial, sobre el poder del Dinero Sionista reinante: la banca ha montado sin dificultad la división de la gente en cuentas corrientes y sujetos pasivos de sus Estados porque, primero, estaban divididos en casas y familias.

La solución política –no la profunda, no la radicalmente transformadora– a este estado de cosas que es hoy de inminente guerra nuclear retransmitida por vídeos en las escandalizadas redes sociales es relativamente sencilla: Consiste en tomar el control del crédito, al menos como se ha hecho en China, donde entre un 80% y un 95% del crédito o nuevo dinero en esta etapa de renacimiento económico de ese país se ha hecho desde la red de banca pública. ¹⁸

Los marxistas y sus imitadores de la izquierda socialdemócrata, social-cristiana y cosas por el estilo, se han olvidado de la nacionalización de la banca, y China ha logrado su ‘milagro’ económico, reconocido por el mismo Banco Mundial de los Cuarenta Ladrones, manteniendo al Estado como primer banquero del país.

Ésta es la discordia internacional que padecemos con especial intensidad desde 2020, con el lanzamiento de la Operación Covid: el Dinero Sionista de Occidente, que es dinero privado, significa poder privado, mientras que el dinero público de China quiere decir que allí el gobierno tiene poder, dicho de otro modo: que en China hay poder público. Y la razón por la que la Rusia de Putin, esa bien armada aliada de China, fue elegida por los planificadores occidentales ¹⁹ para el ataque de desgaste o debilitamiento desde Ucrania, es que su banco central conserva lazos fuertes con los Cuarenta Ladrones y sus órganos de poder occidentales: el talón de Aquiles de la Rusia de Putin es la parte que el peso del Dinero Sionista conserva en su sistema financiero. ²⁰

Este peso del Dinero Sionista en Rusia es un factor decisivo en los cálculos que no pueden evitarse a la hora de definir una nueva ‘moneda de los BRICS’. ²¹ Pero todos los Estados que aspiren a integrarse en los BRICS, si quieren que esa integración llegue a una unión monetaria que les proteja definitivamente de los ataques que, hasta ahora, han resultado tan fáciles a los Cuarenta Ladrones, deberán empezar por recuperar la soberanía monetaria, palabras estas últimas que esencialmente quieren decir: tomar el control de su sistema de crédito. Una moneda de los BRICS que tenga en su centro esa moneda china que ha hecho tal demostración de fuerza o, lo que es lo mismo, de honestidad durante las últimas cuatro décadas, no puede ser adulterada y malbaratada al confundirse con los dineros de la red de paraísos fiscales y la banca internacional, centro del poder sionista, lo que es peor: con el crédito privado interesado, rey del sistema financiero en Occidente. Esas dos formas de entender y hacer el dinero son incompatibles, como el agua y el aceite. Y no creo que la lección de gobierno por el bien común que ha dado y sigue dando China al mundo entero, con el altísimo coste que tiene en la lucha contra la corrupción, ²² vaya a terminar con ese regalo a los Cuarenta Ladrones que sería salvar su botín a base de confundir su dinero chimbo con el yuan. ²³

Acaso alguno piense que la solución estaría en fijar un factor de ponderación, que implicase que esas bolsas de Blackrock, Vanguard, etc. serían valoradas, por ejemplo, en un 30% de su importe o cotizaciones a la hora de convertirse a la nueva unidad de cuenta mundial, ²⁴ pero de nada serviría esa operación, aparentemente razonable en el momento del canje o definición de las cuantías de los saldos respectivos en la nueva unidad de cuenta, si Occidente, o medio Banco Central de Rusia, siguieran creando el dinero (el medio de cambio que todos necesitan) a base de decisiones de unos pocos muy interesados y a espaldas de la comunidad. No tardaría el nuevo Sistema en mostrar los síntomas de la podredumbre que padece hoy Occidente y, por él, casi todo el mundo. Y no me cabe duda que los tecnócratas de las finanzas occidentales, bajo la hostilidad mediática que arrima los portaviones nucleares de la OTAN a las aguas territoriales de Taiwan, que son chinas, están negociando a su manera con la OCS (SCO) y otros entes representativos de ese otro Sistema cuya conquista persiguen por debajo de todos los objetivos planetarios publicitados que venden a sus hordas televidentes y vacunables.

El botín de los occidentales vale muy poco porque está hecho en Dinero Sionista, y eso sólo se va a mantener, y va a poder seguir yendo de compras por todos estos países sumisos a la ley del Dinero Absurdo, mientras la gente siga reembolsando los créditos de la banca privada en lugar de negarse y oponer, a la demanda del banco privado, una denuncia o querella por estafa ante el juzgado de lo penal más cercano. ²⁵

Ese dilema que antes mencionaba entre dinero-poder público (como en China) y dinero-poder privado (como en Occidente) es la elección que tenemos que hacer, y resulta que desde por encima de nosotros, o acaso muy adentro, algo ha querido inspirar a un economista, Richard A. Werner, revelándole esta condición fraudulenta del Dinero Sionista que, como no tiene bastante con el botín de siglos saqueándonos, ahora quiere dominar el mundo. Como decía en el reciente artículo Crédito y soberanía, ²⁶ “…. le llegaba a Richard A. Werner ²⁷esta luz o clarividencia, entre las brumas de una ciencia económica contemporánea hecha para marear a propios y estraños, tras haber pedido ayuda, con el fin de poder llevar a buen puerto su tesis doctoral, al mismísimo Dios de los cristianos una tarde de domingo en Tokio, cuando ya desesperaba de poder descifrar el enigma, asunto de su tesis, de los enormes flujos de fondos de Japón que estaban comprando ingentes capitales de inmuebles y empresas por medio mundo: ²⁸ “me eché al suelo y oré… Dios, por favor, dame la solución… recibí algunas señales y símbolos… y a la mañana siguiente, cuando me senté a mi escritorio, tenía la respuesta; había sido literalmente colocada en mi cabeza… la solución es la banca… cuando los bancos conceden los créditos, están creando dinero nuevo.”

Escuso decir que el Dinero Sionista, que tiene en sus oscuros orígenes la persecución religiosa más duradera y absurda de la Historia, ²⁹ es ateo, y que una de las labores más cuidadosamente atendidas por los Cuarenta Ladrones ha consistido, al menos desde el siglo XIX, en conseguir que ese vacío espiritual se apoderase de cuantos más, mejor. Vaciado espiritual que, claro está, no podía lograrse con la misma facilidad en China, donde las transformaciones políticas del siglo XX han podido hacer pensar a los pensantes tanques de Occidente que podían contar con una administración pública tan vendida como lo están casi todas las occidentales, las que se dedican ahora a armar a Ucrania y arruinar a sus propias poblaciones por cuenta del Amigo Americano: ¡Qué sorpresa tan grande se han llevado esos pensadores del Dinero Sionista con Deng Xiao Ping y sus sucesores al frente de ese país donde el Estado controla y dirige la creación de dinero, y no al revés como entre los pobrecillos occidentales! ³⁰

Digo y escribo estas cosas en Venezuela y con cierta urgencia porque, bajo las operaciones mediáticas sucesivas o amontonadas, hay en verdad esa lucha de sistemas que más nos vale entender: los Cuarenta Ladrones, con las Operaciones Covid o Gaza (por no retroceder al 11S o más atrás), ya han dado buenas muestras de cómo respetan las vidas y haciendas de los demás. Basta con esas Operaciones para que nos demos cuenta de que tenemos que ayudarles a abandonar su oficio medieval.

Y sé a ciencia cierta o, mejor aún, por esperiencia en carne propia, que esta lucha de sistemas es real porque desde que, en 2019, en una reunión del CADTM (ahora llamado Comité para la Anulación de las Deudas Ilegítimas) y ATTAC, conocí a esas dos organizaciones de economistas sionistas, que aparentan defender a las víctimas del sistema de la deuda para mejor asegurar su esplotación por cuenta de los Cuarenta Ladrones, agentes desconocidos de éstos (aunque algunos del MOSSAD me fueron presentados en Marbella hacia septiembre de 2021) me han sometido a una persecución, con uso de recursos militares, que me ha servido, por un lado, para saber que es el mismo centro del sistema financiero internacional el que está queriendo callarme, y por otro, que esos banqueros y sus defensores tienen a su servicio las armas más avanzadas y recursos satelitales, de los que sólo disponen los ejércitos más modernos. ³¹

Todo esto es enteramente coherente con el hecho de estar la OTAN dirigida por el sector privado, y dedicada ahora a la ruina de Europa ³² o la espansión en Latinoamérica y el Indo-Pacífico para los amos del Dinero Sionista. En realidad, las guerras contemporáneas tienen que ser, lo primero, fraudulentas o falsas, enfrentando a Estados que nada tienen de enemigos unos de otros, ³³ porque la concatenación o interrelación acelerada de la realidad humana conseguida, en gran parte, gracias a Internet y sus tecnologías ha acabado, seguramente para siempre, con la estrañeza, que es raíz del miedo, entre unas naciones y otras: los más eficaces utilizadores del principio imperialista “divide y vencerás” son quienes han convertido a los humanos de todo el mundo en gente mucho más cercana unos de otros de lo que se precisa para enfrentarlos en esa ceremonia de la estupidez colectiva y dirigente que es la guerra moderna. ³⁴

El olvido de los dioses –que no pueden morir, digan lo que digan los filósofos, puesto que vivir y morir es cosa nuestra, no de ellos–, cuidadosamente perseguido también por el ubicuo aparato de propaganda sionista, es otro factor que reduce mucho las oportunidades de la guerra: ¿Cómo se van a enfrentar el Islam y la Cristiandad, como en los tiempos de Cervantes, o unos y otros con las huestes del Buda o de Shiva, cuando ya les han hecho entender a unos y otros, también con ayuda de Internet, que no hay dios que valga, que todo eso no son más que reliquias de oscuros e infantiles tiempos ya afortunadamente superados?

No hay que olvidar el componente de juego que siempre tuvo la guerra: despiste de las muchedumbres que son su carne de cañón y, a la vez, pasatiempo de hombres poderosos y aburridos, no muy distinto del ajedrez.

En este teatro del Fin del Régimen de Occidente, del Dinero Absurdo o Sionista, aparecen de repente gobernantes que parecen estar genuinamente interesados en la paz y la inteligencia o el entendimiento de las naciones, ya tan cercanas unas de otras. Quien quiera confirmar la ley que los rige sólo tiene que formularles la cuestión siempre pendiente, la que sigue olvidada y eludida en el debate político aún dominado por los Cuarenta Ladrones: ¿Cuándo vamos a tener un dinero hecho en nombre y por cuenta de la comunidad? ³⁵ Y el silencio de los gobernantes más solidarios y amorosos acerca de este asunto aclara enteramente cuál es el amo al que sirven: de eso no se habla.

La piedra de toque de toda política en esta hora del mundo es ésa: a qué llamamos dinero, quién lo hace y para qué. Y las voraces acumulaciones de los últimos decenios tendrán que encontrarse, en cada frontera nacional que sobreviva, con medidas de control de cambios eficaces, pues de lo contrario los Cuarenta Ladrones van a comprar de saldo el llamado ‘planeta’ con el beneplácito de sus leales gobernantes y políticos.

Ése (con el control de cambios) es un riesgo que no pueden dejar de ver los ejecutivos de esta Sión de la banca internacional que quiere seguir rigiendo nuestros destinos ateos y consumistas: que en cada Estado, o en cada comunidad o jurisdicción de cualquier nivel, los que tengan el mando digan: “¿Quién ha comprado toda esa tierra, o todos esos edificios, minas, etc., qué hace con ellos, y en qué medida beneficia a la comunidad? O ¿con qué dinero se han hecho esas compras?”

Se dirá uno que lea esto: “Y yo, ¿qué puedo hacer? ¿Acaso puedo yo impedir que los Cuarenta Ladrones pongan y depongan gobernantes, usen las armas y los satélites, o recorran el mundo con su OTAN robando y matando a su antojo?”

La respuesta es sencilla: Sí puedes. Basta con que te quites de encima esa pobre idea de ti mismo que te has creído, eso de que no puedes hacer nada porque ellos son demasiado poderosos, y te des cuenta de que, si unos cuantos empezasen a hablar claro de estos asuntos, informando a los demás y actuando en consecuencia, la fuerza de la conciencia, ³⁶ actuando sobre muchos otros, muy pronto haría desaparecer de la tierra esa estafa del crédito privado interesado, con lo que se liberarán enormes fuentes de riqueza que viven represadas por el efecto empobrecedor de ese privilegio absurdo. En realidad, lo que está al alcance por la superación del Dinero Sionista o Absurdo es la misma superación de la necesidad material.

Vivimos en una Fábrica de Números, y lo único que utilizan los Cuarenta Ladrones que la dirigen (aparte de las licencias bancarias y sus bancos centrales con el consentimiento de los gobernante sostenedores del tabú del crédito), es la serie de los números naturales, la cual forma parte de la lengua humana.

De lo contrario, si dejamos que los amos de la Reserva Federal, el Banco de Inglaterra y el BIS, que son más o menos los mismos, sigan transformando ellos el sistema financiero ³⁷ a espaldas de la sociedad y a golpe de crisis organizadas, el día menos pensado nos vamos a levantar y nos dirán que la ultima crisis bancaria impone la necesidad de pasar las cuentas de todos al Banco Central, donde nuestro dinero estará seguro y disfrutaremos de la garantía del Estado sobre el 100% de nuestros ahorrillos o depósitos.

Eso, el nuevo dinero digital de bancos centrales (CBDC), vendrá o no acompañado de la anunciada Renta Básica Universal, destinada a asegurar la dieta básica de todos los ciudadanos de segunda en el Nuevo Orden Mundial de los Cuarenta Ladrones, con su parte de proteínas de granja de gusanos ecológicos u otras porquerías más o menos realizables, y como condición o requisito previo para acceder a esa renta básica tan atractiva, que nos librará, por fin, de la maldición del trabajo a muchos que ya habíamos desesperado de encontrarlo, a cambio de unas pocas renuncias fácilmente justificables por espertos televisivos, en las nuevas ciudades de 15 minutos donde los descendientes de Malthus podrán fomentar la propagación de las plagas que vayan descubriéndose para regular la población de la cabaña humana, como condición para poder acceder a esa renta básica –digo– nada mejor que llevar bajo la piel el chip ya ampliamente testado en animales y presos.

Aunque es posible que los adelantos de la Ciencia hagan innecesario el uso del chip para mantener permanentemente vigilados y automáticamente enderezados o liquidados a los pocos rebeldes que vayan quedando.

Y –para lo que sirva– hago una aclaración que ya deberían saber aquéllos de los Cuarenta Ladrones, o sus operarios o ejecutivos suicidas, que tienen encomendado ocuparse de mi caso: Yo no me suicido.

Caracas, 2 de agosto de 2024

1Mis ya no tan escasos y siempre esclarecidos lectores saben bien que llamamos absurdo a este dinero de la fase terminal del llamado ‘capitalismo’ (que es puro capitalismo financiero o timo perpetrado por los banqueros privados a casi todos los demás), el que nace en el crédito y se destruye en el reembolso del mismo crédito, cuando este último se da. Es de recordar aquí el caso de un gran banco europeo cuyo representante, en un interrogatorio ante el órgano supervisor de la banca en Estados Unidos, recibió está pregunta: “¿Por qué tienen ustedes tantos fallidos (o morosos, créditos malos, bad debts)?” De no ser por los fallidos y otras maneras aún más discretas de asegurar la circulación de lo creado en el crédito –esto lo saben bien los banqueros– el Sistema se ahogaría no cada pocos años, sino cada fin de semana.

2Invito a conocer la obra de Anton Chaitkin, que deja ver hasta qué punto ese Estado que se pretende gendarme del Planeta es, él mismo, poco más que una colonia financiera de los Cuarenta Ladrones, en la cual lo primero que, necesariamente, han de desconocer los estadounidenses es quién manda allí.

3Es conocida la relación entre el Institut Pasteur de Francia y la Banca Rothschild a través de Sanofi Pasteur, y debemos a Jean Bernard Fourtillan los detalles de esa fabricación del muy contagioso virus del Covid o SARS-Cov-2, menos peligroso, sin embargo, que la gripe común de todos los años, como es sabido desaparecida en 2020.

4Eso que tuvieron que aprender muy bien los impulsores del sionismo para lograr la sumisión de Estados Unidos a sus intereses en las dos guerras mundiales y después, hasta hoy.

5Poder y control que –como vengo repitiendo– son necesarios para mantener el privilegio que está en el centro del sistema del Dinero Absurdo.

6Había olvidado decir que llamo ‘Cuarenta Ladrones’ a los beneficiarios materiales de esta manera de hacer el dinero, para no entretenernos con sus biografías y personas, que son a veces utilizadas por ellos mismos, sus periodistas y literatos, para confundir y marear a las muchedumbres con asuntos como el satanismo, las redes de pedofilia, los reptilianos, el misterioso y poderoso club de Bilderberg, los Anunakis, etc.: casi todo eso son otras tantas operaciones de entretenimiento y manipulación de masas dirigidas –entre otros fines más evidentes– a seguir logrando –como logran hasta hoy– que casi nadie entienda la estafa que está en el mismo centro del sistema económico que se derrumba y aspira a renovarse a nuestras espaldas y costillas. No quita esto que digo para que haya auténticos satanistas aquí y allá, pero la misma debilidad de la fe en los dioses o el dios que conduce al satanismo ha de conducir necesariamente a la apostasía de Satanás en sus múltiples representaciones o caretas.

7Que lo tengan bien merecido no quita las grandes dosis de organización, redes, trampas, espionajes, chantajes, etc. que se han empleado para alcanzar ese resultado. Y el mismo Dinero Sionista que destruye la fuerza moral de las iglesias al poner en evidencia la debilidad carnal de los sacerdotes es el que impulsa en varias jurisdicciones la legalización de la pedofilia.

8Contra el mandato dado por San Ignacio de Loyola a los de su orden de acceder a ese cargo.

9Así lo declaraba no hace mucho Carlo María Viganò.

10Quien todavía dude que en su país el dinero lo crean la banca privada y sus aliados puede hacer una comprobación muy sencilla, y es consultar la ley del banco central, para ver en ella dos datos que se encuentran en cualquier legislación de Occidente (Cuba era una escepción hace años, no sé ya hoy): lo primero, el Banco central tiene que ser independiente o autónomo, lo que quiere decir que el gobierno nacional carece de poder sobre ese banco emisor (creador de dinero) por escelencia y, además, supervisor del sistema financiero; y segundo, el Banco Central tiene prohibido financiar el déficit del Estado: para eso están los Cuarenta Ladrones y sus compinches.

11En las Directrices del Comité de Supervisión Bancaria de Basilea, órgano del Banco de Pagos Internacionales (BIS, Bank for Internaational Settlements), cuyas normas se reproducen con variantes sin importancia en las normativas nacionales. Obsérvese que ese BIS, que se dedicó durante la segunda guerra mundial, desde la ‘neutral’ Suiza, a preservar el buen funcionamiento del Sistema más allá de las pequeñas diferencias entre unos y otros ventiladas en los campos de batalla, presenta ahora en su página web, como sus propietarios, a 63 bancos centrales, “representativos de países de todo el mundo que, en conjunto, representan cerca del 95% del PIB mundial”, pero no aclara a quién pertenecen esos bancos centrales. El BIS es la Cueva de los Cuarenta Ladrones del cuento, por estar situada en ese lugar más discreto que las otras guaridas de Londres, Nueva York y la problemática Tel Aviv. Durante siglos, los ingleses y franceses, por ejemplo, se pensaron que sus respectivos bancos centrales eran públicos (o sea: del Reino Unido y de Francia), pero resulta que no lo eran. No se conoce a los actuales propietarios (quiero decir: propietarios últimos o efectivos) del BIS, como tampoco a los del Sistema de la Reserva Federal. Se supone que el Banco de Inglaterra pasó a propiedad del Estado al final de la segunda guerra mundial, pero en ese paraíso entre los paraísos fiscales que es la City de Londres, los mecanismos de propiedad fiduciaria y otros recursos habitualmente empleados en esa gran red de ocultamiento de patrimonios dan muchas oportunidades para mantener, como es evidente que se mantiene, ese Bank of England al servicio de los amos del Dinero Absurdo, al margen de quienes sean sus propietarios formales o legales.

12También llamados patrimonio (por ejemplo, en la ley venezolana: artículo 48 de la Ley de instituciones del sector bancario), recursos propios, capital y reservas, …

13Los Estados nacionales no disponen de medios para impedir ese aumento del capital de los bancos nacionales, que es consecuencia de la incuestionable libertad de empresa; complemento de ésta en el sector financiero es la autonomía o independencia de los bancos centrales, la cual significa que ese órgano regulador y supervisor del sistema en cada Estado, en realidad, está al servicio a la banca internacional privada.

14La de Mateo 6, que empieza diciendo: “Padre nuestro que estás en los Cielos, que tu nombre sea sagrado (lo que suelen decir, menos claro: santificado sea tu nombre)…”, y la de Lucas 11, más sencilla y primitiva, que sólo decía, traducida de tal modo que se entienda: “Padre, que tu nombre sea sagrado,…”, en plena conformidad con la recomendación de no llamar “a nadie padre vuestro en la tierra; un solo padre tenéis y está en el cielo.” (Mt 23, v. en Problemas del poder), y dando pleno sentido a esa primera petición de los cristianos, consistente en tenerse verdaderamente por hermanos unos de otros, no ‘hermanos’ entre comillas en la iglesia, frente a los hermanos consaguíneos que abren con toda confianza la despensa o la nevera de casa. Esta confusión, en las traducciones del griego, entre las dos versiones del padrenuestro, claramente distintas en el original griego, parece que empezó ya con la Versión del Rey Jacobo (King James Version), la dominante en el mundo de habla inglesa desde comienzos del siglo XVII, y se consolida a comienzos del siglo XX con la Biblia de Scofield, llena de notas esplicativas, que fue financiada por algunos de los más famosos de los Cuarenta Ladrones a través de su editorial Oxford University Press.

15En una versión de la Biblia editada y prologada por representantes de las iglesias ortodoxa y católica, así como del judaísmo, en el comentario que hacía de los evangelios la autoridad religiosa judía, en general respetuoso; si uno se paraba a concretar cuál era el punto, no tan fácil de señalar, en que el mensaje del Nazareno se apartaba de la religión judía o planteaba alguna cuestión para sus fieles, lo que traslucía era algo que ya se veía en las cartas de San Pablo a la hora de ordenar las asambleas primitivas en contra de la libertad enseñada; algo como “Ese Jesús era un gamberro”.

16Quienes dejan de serlo de inmediato en cuanto pasan a formar parte de una comunidad, más o menos estensa, de hermanos reales, no “hermanos” religiosos o dominicales, entre comillas.

17Como mencionaba hace poco en el artículo titulado Problemas del Poder: De Wall Street a Galilea, un camino para ello consiste en acercarse a conocer el misterio del lenguaje en la obra del estudioso de este asunto más importante de esta etapa de transformaciones profundas: Agustín García Calvo, en editorial Lucina. La relación entre la lengua y el dios ha sido vista como esencial en religiones de todas partes y todos los momentos, y esta última y clara visión no religiosa del lenguaje ha sabido respetar todo el contenido de misterio y poder que ya se veía en el libro de Heráclito, fuente anterior a Sócrates en la que sin duda bebió, con singulares beneficios, este maestro de Zamora a quien se debe mucha más atención, por lo menos, en cualesquiera estudios de lengua, pensamiento o filosofía que aspiren a ser tomados en serio. Los más esclarecidos ateos de este mundo podrían llevarse buenas sorpresas leyendo a este autor, y acaso esas sorpresas servirían para rehacer, no las religiones por favor, pero sí lo que tenían de especialmente bueno, al menos, algunas de ellas. “El único bueno es el dios”, dijo un día el nazareno, y este lingüista esclarecido, hablando del pueblo-que-no-existe al que ha visto tomar toda clase de decisiones en el centro de la lengua, dijo otro día: “Eso es lo que la gente más inteligente que ha habido ha llamado ‘dios’.”

18Hay que recordar una vez más la poderosa red de bancos municipales sin ánimo de lucro que distingue a la economía alemana desde el siglo XIX, razón de ser principal de la hostilidad de los Cuarenta Ladrones contra ese país donde la comprensión general del dinero y el crédito (visible en la obra del muy leído Goethe ya en la segunda década del siglo XIX) ha servido, con otros factores, para convertirlo en la primera potencia económica del mundo, posición que le suele ser reconocida pero se ve bien en el volumen de esportaciones por habitante. Las barrabasadas colectivas de los nazis, financiados en sus comienzos por banqueros usufructuarios de este mismo Dinero Sionista, y el grado de consentimiento de que gozaron entre la adocenada y manipulada población nacional, nada cambia a estos efectos: el Dinero Sionista no ha reinado entre ellos desde poco después de mediados del siglo XIX, con el comienzo del movimiento cooperativista impulsado por gente como Raiffeisen (muchos de esos banquitos municipales alemanes sin ánimo de lucro llevan aún hoy su nombre).

19Hay un documento de la RAND Corporation, varios años anterior a la Operación Militar Especial o guerra de Ucrania, en el que se muestra esa planificación.

20Por ello Glazyev hablaba de “conducta criminal del Banco Central de Rusia” cuando, a resultas de la entrada del ejército ruso en el Donbass en febrero de 2022, Rusia perdía unos 300.000 millones de dólares de reservas en el extranjero, principalmente en el Banco de Inglaterra. Hace poco la ONU se ha pronunciado sobre la ilegalidad de esas ‘sanciones’ por vulnerar principios elementales del derecho, como la soberanía, la no injerencia, etc.

21En realidad, ese grupo o alianza de Estados claramente nacido para quitarse de encima las garras del imperialismo sionista y anglosajón debió abordar pronto, tras su creación en 2006, la necesidad de esa moneda común, y la inexistencia de ésta casi veinte años después pone de manifiesto hasta qué punto es difícil conciliar el interés económico de quienes hacen el el dinero para transformar la realidad común, como China, y quienes lo hacen para el enriquecimiento personal de unos pocos, ésos que vengo llamando los Cuarenta Ladrones. Este último es el caso también de varios países de los BRICS, y la razón que esplica la resistencia que hubo en Alemania, único país europeo con un sistema de creación de dinero razonable u honesto, contra la implantación del Euro, moneda común europea que tanto les ha costado a los alemanes, quienes por un lado ven con ella debilitado el efecto de su crédito municipal no lucrativo o desinteresado, y por otro son año tras año los mayores contribuyentes a los presupuestos europeos.

22Oigo a Matt (Matthew) Ehret comentar que desde la llegada de Deng Xiao Ping al liderato en China, unas 4,7 millones de personas han sido procesadas por corrupción.

23Bien distinto sería el caso si quien accediese a los BRICS fuese Alemania, con esa red de banca municipal sin ánimo de lucro que la distingue del resto del mundo. Pero para que puedan pasare cosas así falta un gran golpe de timón que tire por la borda a los Cuarenta Ladrones, quienes tienen ya previstas y montadas buenas lanchas de salvamento, merced a la tolerancia que con ellos y su Dinero Sionista siguen teniendo hasta hoy la inmensa mayoría de los políticos y gobernantes de izquierdas o derechas, lo mismo da a estos efectos fundamentales.

24En la hipótesis de creación de esa monedad mundial, hacia la que son pasos las incorporaciones a los BRICS de cualesquiera monedas occidentales.

25No me entretengo en detallar lo inevitable que es ‘subsumir’ –como dicen en los juristas– el crédito financiero o bancario, interesado o privado, en el tipo penal de la estafa en cualquier legislación; la comprobación la he hecho con más de un código penal latinoamericano, además del español, dándome cuenta pronto de que esa operación es un modelo de estafa, cuyos requisitos o elementos suelen ser: ánimo de lucro del estafador, engaño al estafado, error de éste, y pérdida o desplazamiento patrimonial en beneficio del estafador. Analice quien quiera, de buena fe, una operación de crédito bancario normal y corriente (por ejemplo, un crédito hipotecario para la compra de una vivienda, desaparecido en la singular Venezuela bolivariana que, lógicamente, los Cuarenta Ladrones llevan años atacando y aspiran a reconquistar con sus gobernantes), y no podrá menos de llegar a esta misma conclusión. Este dato, que salió a la luz con toda claridad en 2014 (con el artículo de Richard A. Werner Can Banks Individually Create Money Out of Nothing?–The Theories and the Empirical Evidence), es sin duda una de las razones del nerviosismo de los Cuarenta Ladrones y sus agentes en esta temporada infernal iniciada el 11 de septiembre de 2001 o, según se mire, con la Operación Covid en 2020.

26Publicado en Colarebo (www.colarebo.net).

27Véanse sus artículos y conferencias en http://www.professorwerner.org, Youtube, etc.

28Se lo contaba hace unos meses a Glenn Beck, como se ve en el vídeo disponible en youtube The central bank currency that LITERALLY gets under your skin (para quien tenga prisa, a partir del minuto 1:07:30 aproximadamente). Esta es la clase de vídeo que la IA de censura se encargará pronto de eliminar del alcance de los mortales regidos por los algoritmos de unos amos desconocidos, ocultos bajo la fachada de las administraciones públicas y sus democracias más o menos conservadas.

29No me detengo aquí en comentar la relación, que sí comenté en alguno de los artículos publicados en http://www.luzrenacida.org, entre la acusación colectiva a “los judíos” por la muerte de Jesús de Nazaret, las consiguientes persecuciones (una y otras, las reiteradas acusaciones y persecuciones, a cargo de representantes de la religión que quizás sea, de entre todas las habidas y por haber, la que mejor ha demostrado y sigue demostrando la misteriosa eficacia del perdón, depreciada por la medicina occidental o inconsciente para poder vender sus potingues y zurrapas como lo hace) y el nacimiento bajomedieval del crédito creador de dinero en manos de unos pocos judíos, tal como fue comprobado por Abbot Payson Usher en la década de 1930 consultando los archivos históricos de Venecia y Barcelona.

30Sobre las contradicciones contemporáneas en torno a la noción de ‘espíritu’ o ‘lo espiritual’ y el papel de las religiones antiguas que perviven habrá que seguir hablando, y he dejado algunas notas hace poco en Problemas del poder. Primer y más inmediato ejemplo de espíritu es esta lengua que usamos y nos usa, y la revolución en su entendimiento que representa la obra de Agustín García Calvo no podrá seguir siendo silenciada por mucho tiempo.

31La continuación de esta persecución y el uso de esos mismos recursos militares y satelitales en Caracas (Venezuela) desde hace ya más de un año es asunto que reviste especial interés para la defensa de este país, como la de todos los restantes países latinoamericanos. La defensa del espacio satelital es otro factor vital, en este momento de la historia, para cualquier nación que aspire a mantener algo de su soberanía.

32Por Seymour Hersch y sus fuentes quedó bien claro en Estados Unidos quiénes volaron los gasoductos que abastecían a Alemania y Europa de gas ruso.

33No me detengo a buscar en la web unas declaraciones leídas hace poco, de un militar estadounidense, en las que se refería a los muchos componentes armamentísticos, electrónicos y otros, que las empresas estadounidenses fabricantes de equipos de Defensa reciben de suministradores chinos.

34Las redes que exhiben la barbarie sionista en Gaza, destruyendo hospitales antes de bombardear a niños y adultos, para que unos y otros no puedan ser sanados en sus salas de urgencia –acaso una de las pocas especialidades médicas actuales que salva vidas a diario–, no dejan ver las consecuencias sicológicas, incluido el suicidio, que afectan a ese ejército de soldados imperialistas que no saben que lo son: las grandes naciones de Occidente (Reino Unido, Estados Unidos, Israel,…) son las más y mejor engañadas por los Cuarenta Ladrones que extraen el fruto financiero del imperialismo sionista que las rige. El reciente suicidio del siquiatra que atendía al presidente de Israel, agente político del Dinero Sionista como sus antecesores en el cargo, es buen indicio de la mentalidad que domina entre los ejecutores de la política que los Cuarenta Ladrones, amos y señores del Dinero Sionista, imponen al mundo.

35El silencio de Donald Trump sobre este asunto, pese a haber fomentado las relaciones con Rusia y China en su primer mandato, pone en evidencia los límites a que está sujeto, pese a las similitudes que no deja de tener con aquel John F. Kennedy que tuvo menos suerte que él en el atentado de Dallas.

36 Eso que parecería que desconocen los Cuarenta Ladrones y sus muchos compinches, pero ese aparente desconocimiento sólo significa que lo han padecido demasiado. En realidad, quienquiera que conozca la casi inmunidad a la enfermedad de que disfrutan los drogadictos de toda la vida (cocainómanos, heroinómanos, ludópatas…otras tantas víctimas del Dinero Absurdo que mantiene y fomenta esos negocios), quienes llegan a quedarse en los mismos huesos sin caer enfermos, debería entender de inmediato por qué pueden tener tan buen aspecto o largas vidas muchos de los Cuarenta Ladrones o sus agentes más visibles en las pantallas: están drogados, y huelga decir cuál es su droga preferida.

37 Ellos lo llaman ahora ‘ecosistema’, porque hay que aprovechar todas las oportunidades para dulcificar el veneno de las mentiras que son la esencia del poder.