Por: Henry Pacheco.

Marco Rubio pide ayuda a China, mientras Irán anunció el cierre del estrecho de Ormuz, el liderazgo global de Donald Trump se tambalea, El gobierno de Donald Trump no calculó su ataque contra Irán, el error estratégico ya está teniendo consecuencias, Ahora en lugar de sostener discurso de fuerza está rogando a China, que los ayude a detener un desastre que ellos mismos provocaron.

Después de atacar instalaciones nucleares iraníes, el gobierno estadounidense no esperaba que la respuesta de Teherán fuera tan rápida, el parlamento iraní aprobó una medida para cerrar el estrecho de Ormuz.  por donde pasa el 20% del petróleo mundial, eso cambió todo.

Estados Unidos ya no habló de poder, habló de consecuencias y lo que antes presentaba como una acción decisiva, ahora se convirtió en una amenaza que no puede manejar solos. El secretario de Estado Marco Rubio no solo advirtió que cerrar el estrecho sería una escalada masiva, también pidió públicamente que China interceda con Irán, el mismo gobierno que ha criticado y sancionado a China, durante años ahora necesita su ayuda, lo dijo en tono diplomático, lo dijo en tono urgente porque saben que si cierre esa vía se desata una crisis energética global.

Ya no estamos frente a un conflicto entre potencias, estamos frente a un error político, que ya no pueden resolver, Marco Rubio declaró que China debería intervenir porque depende del petróleo que cruza por el estrecho de Ormuz. Intentó disfrazar su súplica como un consejo, pero en realidad fue un reconocimiento abierto de que Estados Unidos tiene miedo a las consecuencias económicas, miedo a que Irán no se detenga y miedo a que ya nadie les responda con respeto.

la intervención militar que ordenó Trump fue improvisada, no midieron los tiempos, no analizaron las reacciones, y ahora al ver que, Irán no retrocede se doblan. Le piden a China que hable con Teherán porque ellos ya no manejan, ni pueden manejar el conflicto. El país que presumía liderazgo ahora se refugia detrás de un rival geopolítico.

Estados Unidos tiene opciones para enfrentar el cierre del estrecho, pero al mismo tiempo aseguró que, serán otros países los más afectados, parece que intentan culpar a otros de una situación que ellos mismos provocaron, no se hacen responsables, quieren que China los saquen del problema, mientras ellos se mantienen como si nada. El discurso de fuerza del gobierno de Trump solo duró, mientras no hubo respuesta, en cuanto Irán mostró firmeza, se les vino abajo toda la narrativa.

Irán respondió con misiles sobre Israel, y con una medida concreta legal, y con un alto impacto económico y eso los puso en crisis, A la petición a China, es más que diplomática, es una rendición disfrazada, Cuando alguien ataca y luego ruega que un tercero intervenga, es porque perdió el control, El hecho de que Marco Rubio declare abiertamente que China debe llamar a Irán, demuestra que están cediendo, ya no se sienten seguros, y no están dispuestos a escalar el conflicto, si no tienen el control o respaldo,  por eso buscan ayuda, aunque sea de un país ,que antes despreciaban,

Esta actitud debilita la imagen de Estados Unidos, un gobierno que actúa con seguridad, no necesita favores y menos de un adversario, El mensaje es claro Trump, quiso mostrarse fuerte, pero su propia torpeza lo llevó a depender, de quienes siempre quiso aislar, el error está en la raíz del ataque a Irán, no fue planeado con visión, fue una acción precipitada que no consideró.

El papel de China, la reacción de Irán, ni el valor geopolítico del estrecho de Ormus y ahora están contra del cierre de ese estrecho, Disparó las alertas globales y mientras Trump guarda silencio Rubio busca ayuda donde sea, Estados Unidos suele imponer condiciones hoy suplica, antes dictaba sanciones, hoy pide favores, antes atacaba sin avisar, hoy necesita intermediarios, eso es lo que marca la diferencia, la debilidad no se puede ocultar. El error no fue solo militar, fue diplomático, provocaron un escenario de tensión, sin tener una salida clara, ahora dependen de China para frenar a Irán.

Han perdido autoridad internacional, Si China decide intervenir, lo hará por sus propios intereses, no por obedecer a Estados Unidos.  lo que se está viendo, es una muestra más, de cómo los gobiernos conservadores actúan por impulso, Luego buscan a quienes siempre criticaron, para resolver sus errores, la derecha en el poder como en el caso de Trump solo sabe aparentar fuerza. pero cuando sus acciones generan reacciones reales, se doblan. le piden a China lo que nunca pedirían a sus aliados y eso expone su debilidad.                      

El parlamento de Irán, actuó con rapidez y aprobó oficialmente ese cierro, del estrecho de Ormuz. Esta decisión no fue una amenaza cualquiera, fue un mensaje directo. si Estados Unidos insiste en atacar, el mundo entero pagará las consecuencias, y lo haría no con armas sino con petróleo.

Irán no está improvisando, está usando su ubicación como un instrumento de presión legítimo, por ese estrecho pasa una quinta parte del petróleo que se consume a nivel mundial, el bloquearlo significa golpear el corazón del comercio energético global, Irán no solo se defiende sino que pone condiciones, con el cierre del estrecho ha dejado sin opciones a Washington. ya no pueden seguir con ataques sin pensar en los efectos colaterales,

El estrecho se cierra no solo afecta China también lo hacen India, Japón, Europa, y de forma indirecta la propia economía estadounidense, eso explica por qué Marco Rubio fue directo a pedir a China que Intervenga, ya no se trata de controlar a Irán, se trata de evitar que se derrumbe el mercado del petróleo.

La postura de Irán es firme, no están dando señales de ceder, no están pidiendo diálogo, están aplicando una medida respaldada por su poder legislativo, y por su derecho territorial, Estados Unidos reacciona con declaraciones, Irán avanza con decisiones, el equilibrio de poder se está inclinando hacia quienes tienen control real sobre sus rutas estratégicas,  no sobre discursos.

La respuesta de Trump ha sido débil, en lugar de explicar por qué decidió atacar instalaciones iraníes, guarda silencio, En lugar de presentar una estrategia sólida, deja que Marco Rubio salga a pedir favores a China. eso genera una confusión en el gobierno estadounidense están perdiendo iniciativa política al respecto. la figura de China empieza a crecer, Pekín no ha dicho nada públicamente, y China tienen en sus manos una clave del desenlace, Estados Unidos le suplica a China que hable con Irán y China en silencio deja ver, que se note quién manda en esta nueva etapa geopolítica.

Los papeles se han invertido, la potencia que antes ignoraba sus rivales hoy necesita que uno de ellos, le abra una puerta de salida, Si China decide no intervenir, Estados Unidos se queda sin opciones reales y si lo hace será bajo sus propios términos, es así que Trump y su equipo ya no están al mando del conflicto que ellos mismos iniciaron, Irán gana autoridad, no por la fuerza militar, sino por la respuesta inteligente del parlamento, Usaron su geografía, usaron su petróleo, y lograron algo que pocos esperaban, Estados Unidos, sin que ellos dispararan una sola vez contra Estados Unidos.

La prensa conservadora empieza a dividirse algunos exigen más fuerza, otros critican el error de haber atacado sin pensar, En medio de todo Trump ya no tiene el control, En este sentido el conflicto regional se marcha a una disputa global, donde se reacomodan las alianzas los liderazgos y las prioridades.

Irán ya no es solo un país bajo presión, es un actor central, que pone condiciones, china no solo es una potencia económica, es un mediador que no ha dicho una sola palabra, pero tiene poder sobre la mesa. Estados Unidos ya no es la voz principal. al respecto las relaciones.

La mediación de Marco Rubio en este conflicto, se ha hecho notar en medios como Fox News y CBS, quienes confirman que el gobierno de Trump necesita una salida urgente, ya no hablan de castigar a Irán hablan de evitar que las cosas se salgan de control.

El silencio de China pesa más que cualquier discurso, porque mientras Estados Unidos grita, China observa, mientras Trump amenaza, Irán legisla, mientras Washington pide ayuda, Pekín decide si participará, En esta crisis queda claro quiénes tienen poder real y quiénes lo perdieron.

Lo más importante, muestra como una mala decisión militar, puede llevar a una potencia, a rogar. El daño no es solo estratégico, también es moral, porque el gobierno que hablaba de liderazgo ahora, está subordinado a lo que hagan sus rivales.