Por. Henry Pacheco: En el mercado laboral, al igual que en cualquier otro mercado, el salario relativo de la mano de obra calificada está determinado por la interacción de la oferta y la demanda. El salario es el «precio» del trabajo y, en un mercado competitivo, se ajusta para equilibrar la cantidad de trabajo que los trabajadores están dispuestos a ofrecer y la cantidad que los empleadores están dispuestos a demandar.
Puntos clave de la teoría
La teoría propone que el mercado laboral es el resultado de una «carrera» continua entre dos fuerzas:
La oferta de mano de obra educada: determinada por el ritmo al que el sistema educativo produce trabajadores con habilidades relevantes y demandadas.
La demanda de habilidades: impulsada por el progreso tecnológico que, históricamente, ha favorecido a los trabajadores con mayor educación y habilidades especializadas (un fenómeno conocido como cambio tecnológico sesgado por las habilidades).
Cómo explica la desigualdad
La desigualdad salarial se incrementa cuando la demanda de trabajadores altamente calificados, impulsada por la tecnología, supera la oferta de trabajadores educados. Por el contrario, si la oferta de trabajadores calificados generada por el sistema educativo excede el ritmo del avance tecnológico, la desigualdad de ingresos tiende a disminuir.
Goldin y Katz aplican esta teoría al siglo XX estadounidense, demostrando que la expansión de la educación secundaria y superior en la primera mitad del siglo («la carrera de la oferta») contribuyó a reducir la desigualdad. No obstante, a partir de la década de 1970, el crecimiento educativo se desacelero, mientras que la tecnología continuó avanzando rápidamente, explicando así el aumento de la desigualdad salarial observado desde entonces.
En síntesis, la teoría de «la carrera entre la educación y la tecnología» proporciona un marco para comprender cómo la interacción entre la inversión en educación y la innovación tecnológica influye en la estructura salarial y la distribución del ingreso en una economía.
cómo la oferta y la demanda determinan el salario relativo de la mano de obra cualificada.
En el mercado laboral, al igual que en cualquier otro mercado, el salario relativo de la mano de obra cualificada está determinado por la interacción de la oferta y la demanda.
El salario es el «precio» del trabajo y, en un mercado competitivo, se ajusta para equilibrar la cantidad de trabajo que los trabajadores están dispuestos a ofrecer y la cantidad que los empleadores están dispuestos a demandar.
Demanda de mano de obra calificada
La demanda de trabajo calificado proviene de las empresas que necesitan empleados con habilidades específicas para producir bienes y servicios. Esta demanda depende de:
La productividad del trabajador cualificado: Los empleadores demandan mano de obra cualificada porque son más productivos. Cuanto mayor sea su contribución a la producción de la empresa, mayor será la demanda de sus servicios y, por ende, su salario.
El precio del producto final: Si el precio de los bienes o servicios que produce la mano de obra calificada aumenta, la empresa estará dispuesta a pagar salarios más altos para contratar a más trabajadores calificados y así aumentar su producción.
El avance tecnológico: El cambio tecnológico, especialmente el cambio tecnológico sesgado por las habilidades, ha incrementado la demanda de trabajadores calificados en las últimas décadas. La tecnología complementa y aumenta la productividad de estos trabajadores, mientras que puede reemplazar las tareas de los no calificados.
Oferta de mano de obra calificada
La oferta de trabajo calificado proviene de las personas que han invertido en educación, capacitación y experiencia para adquirir las habilidades necesarias. La oferta de mano de obra calificada depende de:
El número de personas con educación y habilidades relevantes: La cantidad de personas que se gradúan de universidades, programas técnicos o tienen experiencia relevante es el factor principal. Un aumento en el número de graduados, por ejemplo, aumenta la oferta de trabajo calificado.
El costo y el esfuerzo de la formación: Cuanto más difícil, costoso o largo sea el proceso para obtener una calificación, menor será la oferta de trabajadores con esas habilidades, lo que ejerce presión al alza sobre los salarios.
Las decisiones de los individuos: Los individuos deciden si se forman y en qué campo, basándose en la rentabilidad esperada,
que es la diferencia entre los salarios de los calificados y los no calificados.
Determinación del salario relativo
El salario relativo (la diferencia salarial entre un trabajador calificado y uno no calificado) se determina por el punto donde la curva de demanda de mano de obra calificada se cruza con su curva de oferta.
Si la demanda de calificados crece más rápido que la oferta: Se produce una escasez de trabajadores calificados. Las empresas compiten para atraer y retener a este talento, lo que eleva sus salarios y, por lo tanto, aumenta el salario relativo en comparación con la mano de obra no calificada.
Si la oferta de calificados crece más rápido que la demanda: Hay un excedente de trabajadores calificados. La competencia entre ellos por los puestos de trabajo disponibles presiona a la baja los salarios, lo que reduce el salario relativo.
En las últimas décadas, la tecnología ha acelerado la demanda de trabajadores cualificados (por ejemplo, ingenieros de software, analistas de datos, etc.) a un ritmo más rápido que el de la oferta. Este desequilibrio ha provocado un aumento significativo del salario relativo de los trabajadores cualificados, contribuyendo a una mayor desigualdad de ingresos.
