Categoría: BOLIVIA

Por Adriana Salvatierra*

Durante la presidencia de Luis Arce se desmantelaron proyectos industriales clave, se descuidaron las exportaciones estatales y se agudizó la dependencia de las reservas internacionales. La combinación de desabastecimiento, inflación y falta de dólares llevó a una crisis multidimensional

Tras catorce años de gobierno liderado por Evo Morales, el golpe de Estado de 2019 provocó una grave crisis política, social, institucional y económica, profundizada por la pandemia. A pesar de ese contexto adverso, los sectores populares que sostuvieron el Proceso de Cambio lograron recuperar el poder en 2020 con una victoria contundente. La razón de esa victoria se debe a una triada ampliamente difundida: en lo económico, la nacionalización de recursos estratégicos y recuperación de empresas estatales; en lo social, la redistribución de la riqueza que logró sacar a más de tres millones de bolivianos de la pobreza; y en lo político, una nueva Constitución que debatió las bases del Estado Plurinacional.